Origen mineral y alteraciones. Mineralogia arenas

Para comprender la génesis del suelo es importante delimitar qué minerales son heredados de la roca madre y qué minerales son de origen edáfico. Igualmente es de interés conocer el grado de alteración de los minerales, así como la naturaleza de la alteración que presentan.

Minerales heredados. La gran mayoría de los minerales encontrados en la fracción arena gruesa son heredados del material original, por ello en todos los casos hay una clara dependencia entre la mineralogía de las arenas gruesas y el tipo de roca madre del suelo.

Como minerales heredados tenemos: cuarzo, chert, ortoclasa, microclina, plagioclasas, moscovita, biotita, dolomita, siderita, granates, distena, andalucita, estaurolita, turmalina, cloritoides, rutilo, piroxenos, anfíboles, zoisita, clinozoisita, casiterita, ilmenita y pirita.

Minerales edáficos. Y como minerales formados por procesos edáficos se ha encontrado: hematites, goethita, maghemita, calcita, yeso, bassanita, calcedonia, clorita, compuestos de manganeso y leucoxeno.

Muchos de estos últimos minerales pueden ser también, en algunas ocasiones, de origen heredado, como es el caso, por ejemplo, de los carbonatos. Así los carbonatos representan un componente muy móvil que sufren disoluciones y acumulaciones secundarias, siendo a veces fácil distinguir los carbonatos heredados (sobre todo cuando contienen restos fósiles) de los edáficos (en ocasiones con formas convolutas e impregnadas con mineralizaciones de hierro, conteniendo arcillas y frecuentemente localizados en los macroporos del suelo).También se ha encontrado calcedonia de origen detrítico o formada por procesos edáficos a partir de sí1ice amorfa. En este último caso, los granos de calcedonia muestran una contextura compleja, conteniendo compuestos de hierro e incluso restos de arcilanes fuertemente orientados, más o menos disruptos.

A veces, las condiciones de formación de determinados minerales quedan claramente reflejadas en su distribución en el perfil del suelo. Este es el caso concreto de los óxidos de hierro, tan abundantes en las arenas gruesas de suelos desarrollados sobre rocas calizas, dolomias y margas. Así la hematites y la maghemita se concentran muy preferentemente en los horizontes superficiales de los suelos estudiados (lo que está de acuerdo con sus condiciones de estabilidad), mientras que la goethita se concentra en los horizontes más profundos, y por tanto más húmedos.

Comportamiento del contenido en minerales de hierro en función de la profundidad, expresados como porcentaje de los suelos estudiados
	GOETHITA	HEMATITES	MAGHEMITA
Aumenta regularmente	41%	---	---
Aumenta irregularmente	26%	7%	---
Permanece constante	---	---	---
Varia irregularmente	21%	12%	7%
Decrece irregularmente	13%	20%	13%
Decrece regularmente	---	61%	80%
Número de suelos	39	41	15

Finalmente, destaca la frecuente presencia de unos granos formados por un agregado de matriz de contextura edáfica, constituidos por arenas, limo y arcilla y coloides de hierro.

Estos granos han resistido los tratamientos normales de dispersión e incluso han permanecido estables tras una agitación mecánica continuada durante 96 horas seguidas. Tratados con HCl pierden su coloración, debido a la eliminación de los compuestos de hierro diseminados por la masa basal del suelo.

También se destaca que se han encontrado nódulos y concreciones alorthicos (WIEDER y YAALON, 1974). Estos granos se caracterizan por presentar un conjunto de rasgos que reflejan el transporte sufrido por estos granos. Estos rasgos son: diferencias en la contextura plásmica y/o en la contextura básica, y/o en la mineralogía de los granos de esqueleto con respecto al resto del suelo, formas muy redondeadas, bordes nítidos, contexturas concéntricas constituidas por la alternancia de materiales diferentes, presencia de "bocados" superficiales que interrumpen las capas concéntricas cútanes sobre glébulas en horizontes eluviales, abundancia de granos de cuarzo sobresaliendo (posiblemente debido a la disolución parcial del grano durante el transporte). Los granos alórticos son especialmente abundantes en los horizontes superficiales de algunos suelos, hecho que parece indicar que estos suelos han sufrido un aporte importante de materiales procedentes de los suelos próximos.